- Solo en 2020 nacieron 25,356 bebés de madres adolescentes, esto representa el 22.5 % de todos los nacimientos del país.
República Dominicana registra una de las mayores tasas de fecundidad de adolescentes en América Latina, siendo este, junto con la unión temprana, dos de los principales desafíos que enfrenta el país, explicó la representante del Fondo de Población de las Naciones Unidas (Unfpa), Sonia Vázquez.
Según la última encuesta de Enhogar-Mics, en 2019 la tasa de fecundidad en adolescentes se ubicó en 77 nacimientos vivos por cada 1,000 mujeres de 15 a 19 años.
“Las uniones tempranas y los embarazos en adolescentes son prácticas que impiden su desarrollo en pleno y propician dificultades relacionadas con la deserción educativa y la mortalidad materna y neonata”, dijo Vázquez durante el “Foro Internacional Salud Integral de Adolescentes” realizado en el país la semana pasada.
Vázquez señaló que pese a disminuir la natalidad en adolescente, al pasar de 92 a 77 nacimientos por cada mil mujeres de 15 a 19 años, se deben tomar en cuenta las brechas que persisten por áreas geográficas como es la rural.
En ese sentido, la encuesta de la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE), refleja que la tasa de fecundidad en adolescentes en el área rural es de 110 nacidos vivos en comparación con un 66 del área urbana.
Mientras que, en términos regionales, la mayor tasa se encuentra en el Cibao Noroeste (136), en tanto, la región Ozama presenta la tasa más baja con 66 nacidos vivos por cada 1,000 mujeres de 15 a 19 años
“Ese es un indicador al que tendríamos que poner mucha atención, igual al del nivel de educación y el extracto socioeconómico; ahí se refleja la necesidad de seguir impulsando las acciones de prevención”, indicó Vásquez.
Los datos de la ONE muestran que, a mayor nivel educativo, menor tasa de fecundidad adolescente, asimismo aquellas que pertenecen al quintil más rico tienen tasas de 28, en contraste con las más pobres, las cuales alcanzan una tasa de 146 nacimientos por cada 1,000 mujeres de ese grupo de edad.
“Solo en el 2020 nacieron 25,356 niños y niñas de madres adolescentes, esto esquivale a casi 70 nacimientos por día y eso es mucho, esto representa el 22.5 % de todos los nacimientos reportados en el país”, precisó.
Falta de planificación
La representante de la Unfpa en el país expresó que esta situación está relacionada con el hecho de que una de cada cuatro adolescente ha iniciado una unión y el 27 % de esta ha reportado demanda insatisfecha de métodos de planificación familiar, a pesar de ser la anticoncepción una acción fundamental para prevenir embarazo.
Vázquez explicó que algunas de las causas de estos embarazos suelen ser la ausencia de educación integral de la sexualidad, de proyectos de vida que vayan más allá de la maternidad y el limitado acceso a los servicios de salud sexual y reproductivo de calidad.
“En ningún país del mundo se han reducido los embarazos adolescentes sin que haya un acceso de los anticonceptivos por parte de los adolescentes y jóvenes. Hay mucho trabajo por hacer para prevenir la incidencia de las uniones en los adolescentes y los embarazos temprano”, enfatizó.
Un estudio realizado recientemente por la Unfpa estima que la prevalencia de la maternidad temprana tiene un costo para el país de 1,652 millones.
“Sin duda quienes resultan ser más afectadas son las adolescentes, que al quedar embarazada deben enfrentar situaciones en la que se vulneran sus derechos y están expuestas a la violencia, enfrentan limitaciones en educación de calidad, deben realizar trabajos con baja remuneración y afrontan muchos otros obstáculos que reducen su capacidad de desarrollar de manera integral y que perpetua el circulo intergeneracional de la pobreza”, dijo.
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